Moscú,20/2/2022.- El Partido Comunista de la Federación Rusa (PCFR), a través del Presidente del Comité Central, G.A. Zyuganov, solicitó a la comunidad internacional frenar las acciones fascistas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Ucrania, cuyas provocaciones están tensando las relaciones ruso-ucranianas con el propósito de atizar un conflicto que solo beneficia a los intereses hegemónicos de EEUU en la región.
De igual modo alertó sobre una “agresión informativa” que genera un clima mundial de rusofobia para hacer ver ante la opinión pública que es Moscú quien alienta una posible guerra. Para el PCFR “el objetivo de las autoridades estadounidenses y sus asociados en Londres no es sólo la esclavización final de Ucrania y el desangramiento de Rusia.
Al mismo tiempo, se está llevando a cabo un proyecto para socavar el potencial económico de la Unión Europea y reducir su influencia en el mundo moderno”. Además de abogar por la protección de la población civil de de las repúblicas populares de Donetsk y Luhansk, que está siendo bombardeada por fuerzas ucranianas y forzada al desplazamiento tras decretarse su evacuación masiva por las autoridades.
El PCFR propone cuatro medidas de emergencia para detener la escalada bélica, proteger a la población de la zona y detener la desnazificación de Ucrania y otros espacios pos-soviéticos por el bien de la seguridad internacional.
A continuación el documento completo traducido:
G.A. Zyuganov: Es hora de detener las acciones fascistas de la OTAN en Ucrania
Presidente del Comité Central del PCFR G.A. Zyuganov 2022-02-19 16:52 (actualización: 2022-02-19 17:56)
La situación en la frontera entre Ucrania y las repúblicas del Donbás se ha agravado hasta el límite. Las formaciones armadas de la parte ucraniana están intensificando sus bombardeos sobre el territorio de las repúblicas populares de Donetsk y Luhansk, lo que obliga a la evacuación masiva de la población. Al mismo tiempo, se intensifica la guerra informativa contra Rusia por parte de los medios de comunicación occidentales, prooccidentales y nacionalistas ucranianos. La situación es una prueba directa de la estrecha coordinación de las provocaciones militares y la agresión informativa.
El presidente de EE.UU. dirige cada vez más abiertamente empresas peligrosas. Biden anuncia personalmente fechas míticas para el inicio de la guerra de Rusia contra Ucrania, comenta los enfrentamientos en Donbass, reprende a Zelensky por su admisión de que Rusia no se está preparando para la agresión, o por no viajar a tiempo a Múnich para una conferencia de seguridad. En otras palabras, Washington está provocando a propósito el máximo agravamiento de las relaciones ruso-ucranianas.
El Comité Central del PCFR ha señalado en repetidas ocasiones que el objetivo de las autoridades estadounidenses y sus asociados en Londres no es sólo la esclavización final de Ucrania y el desangramiento de Rusia. Al mismo tiempo, se está llevando a cabo un proyecto para socavar el potencial económico de la Unión Europea y reducir su influencia en el mundo moderno. La guerra en el centro de Europa, las sanciones forzadas contra Rusia y el declive de la actividad económica en la UE garantizarán que Estados Unidos aumente su poder competitivo. Débil en la competencia global con la China socialista, Washington ha comenzado a resolver sus propios problemas hackeando las economías de sus aliados de la OTAN.
Hoy, todos los que juegan con las reglas de los anglosajones arremeten habitualmente con acusaciones contra Rusia y «pasan por alto» las acciones provocadoras del Kiev oficial. Al mismo tiempo, el hecho de la paulatina banderización de Ucrania (se refiere a que el actual gobierno tiene a Stepan Bandera, un nacionalista ucraniano y cómplice de la Alemania nazi, como símbolo) ha sido ignorado durante mucho tiempo. Los políticos occidentales fingen desconocer el significado y el espíritu de las decisiones del Tribunal de Nuremberg. El grancapital de EE.UU. y de Europa, que consintió el ascenso de Hitler al poder, está dispuesto a promover el derramamiento de sangre y la agresión incluso hoy. A mediados del siglo pasado la humanidad pagó esa política con muchos millones de víctimas. Sólo el pueblo soviético perdió en la lucha contra el fascismo 27 millones de vidas de sus hijos e hijas.
El PCFR cree que el chantaje militar occidental debe recibir una respuesta de principios en forma de una posición firme de Rusia para proteger a la población pacífica de Donbás y castigar a los agresores. Al mismo tiempo, la tarea más importante para la comunidad internacional es detener las acciones de Occidente para perturbar a Ucrania. Se está produciendo una situación en la que se necesita un conjunto de las siguientes medidas de emergencia:
Primero. La primera prioridad es ayudar a los niños, a las mujeres, a los ancianos, a todos los refugiados de Donbás que buscan refugio de la guerra en territorio ruso. Instamos a todos a prestarles la ayuda necesaria. Las autoridades estatales, los partidos y movimientos, las empresas y organizaciones, y los ciudadanos de nuestro país deben participar en esta labor.
Segundo. El llamamiento de la Duma Estatal al Presidente de la Federación Rusa para que reconozca la independencia de la DPR y la LPR, adoptado a iniciativa del PCFR, es cada vez más relevante. Hoy esta decisión se convierte en la clave para frenar la agresión contra las dos repúblicas y proteger a su población.
Tercero. La situación con la implementación del complot multilateral de Washington para esclavizar a Ucrania, demonizar a Rusia y debilitar a Europa se ha vuelto muy transparente. No tiene sentido esperar un diálogo con los herederos de Bandera y Shukhevych, que también tienen poderosos mecenas. Es necesario aplicar toda una serie de medidas para obligar a los iniciadores del derramamiento de sangre masivo a la paz.
En cuarto lugar. En el ámbito internacional, ha llegado el momento de lanzar una ofensiva política decisiva contra cualquier intento de rehabilitación del fascismo. Las autoridades rusas deben utilizar activamente toda la influencia de nuestro país en las organizaciones internacionales con este fin. Para lanzar el movimiento antifascista y antibélico, proponemos utilizar todo el arsenal de la cooperación bilateral y multilateral con otros países, y hacer un amplio uso de los métodos de la diplomacia parlamentaria y pública.
Es hora de que todo el mundo se dé cuenta de que los mecanismos de la democracia en Ucrania han sido abolidos. Desde el golpe de Estado de 2014, las bandas nacionalistas agresivas han dictado cada vez más la política real en su territorio. Representando a una minoría terrorista absoluta, mantienen al pueblo ucraniano atemorizado e imponen normas de conducta a los gobernantes. Este hecho también explica la transformación política de Vladimir Zelenski. Elegido por los ucranianos como presidente de la paz en el Donbass y de la normalización de las relaciones con Rusia, resultó ser un agente de la política exactamente opuesta.
En la situación actual, la tarea de liberación de la dictadura de Bandera no puede ser realizada por el propio pueblo ucraniano. La población civil del país todavía puede expresar parcialmente su opinión con la ayuda de los restos de los procedimientos parlamentarios, pero no puede hacer frente a las fuerzas del terror fuertemente armadas. La tarea de desnazificación de Ucrania debería ser una de las principales preocupaciones de la comunidad internacional.
Tribuna Popular 